Él Hada De Los Dientes Ataca
Estás sola. eres una mujer asustada y temerosa en este bosque oscuro y húmedo.
Puedo olerte. Puedo sentir tu corazón latiendo, cada uno de ellos. Me encanta moverme al ritmo que se acelera cuando estás asustada.
¿Qué fue eso? ¿Una ardilla? ¿Un zorro? Tal vez lo fue. O quizás fui yo.
Te he observado durante mucho tiempo, sabes, estuve allí cuando estabas en el patio de recreo de tu primer día en la escuela.
Yo estaba allí cuando lo dejaste.
Yo estaba allí cuando tuviste tu primer beso.
Todos estos recuerdos felices, y sin embargo nunca me los diste a cambio.
Eso realmente me dolió.
Pero ahora me estoy acercando.
Ahora puedo oír tu aliento. Puedo oler tu sudor y las lágrimas corriendo por tu cara mientras corres.
Sabes que estoy ahí, pero no sabes cómo.
Te paras, te das la vuelta y observas el área a medida que recuperas lentamente el aliento.
Te vez tan linda cuando corres, especialmente cuando no sabes de lo que estás huyendo. intentas mirarme, ¿aún no me ves?
Siempre quise que me vieras. Espero que esta noche por fin puedas.
Empiezas a correr de nuevo, tratando de encontrar la manera de salir de los árboles, volver hacia la gente, el ruido y todas las cosas que odio.
Pero yo prefiero el silencio.
No hay mejor sentimiento en el mundo.
Eso es lo que vengo a darte.
La oportunidad de que sepas lo pacífico que es realmente.
Estoy justo detrás de ti ahora.
Te Atrapas el pie en algo y caes al piso, pero cuando revisas no encunetras nada. ¿fue una raíz? ¿Una rama caída? ¿O fui yo otra vez?
Un millón de posibilidades vuelan a través de tu cerebro mientras tratas de encontrar una explicación a tu caída.
Quedate ahi, no te muevas. Tus ojos están cerrados, tratando de deshacerte de todo, de despertar de la pesadilla en la que estás.
¿Por qué no los abres? Estoy justo aquí, frente a ti, quiero que me veas.
Me acerco a ti y te toco. Nunca he sido capaz de tocarte antes. Tu piel es tan suave, tan suave. Tan impecable.
Si paso mi mano por tu cara, ¿puedes sentirme? yo sí puedo sentirte. Cada parte de tu piel, cada pelo, cada célula. Puedo sentir tus lágrimas.
¿Por qué lloras? ¿No te caigo bien? ¿No quieres verme?
Solías decirme que me fuera cuando eras más joven. El "coco" al que solías llamarme.
Siempre me molestó cuando me decias que me fuera. Pero lo hacia. por qué quería que fueras feliz.
pero ahora es mi turno.
Abre los ojos.
Continúa. Eso es, abrelos
¿Puedes verme?
Sé que puedes, lo sé por qué ya no respiras. Esperas que me vaya?. je, Bueno, eso ya no va a pasar.
Me inclino hacia tu cara,
puedes ver mis ojos,
blancos y sin vida.
Escondido bajo la cortina de oscuridad que es mi cabello.
Te estoy sonriendo,
¿te gustan mis dientes?
Son tuyos.
Todos los dientes que perdiste cuando eras más joven.
Yo los guardé para ti.
Mira, los traigo puestos, les he sacado filo, ¿te gustan?
Me acerco a tu oído y te susurro lo que siempre quise decirte.
"No estás sola."
Cierra los ojos, y prepárate, porque ya nunca los abriras de nuevo.
Encontraron tu cuerpo colgado en el árbol tres días después, tus ojos nada más que charcos sin vida de materia blanca. pero faltaba algo, Tus dientes no están, los tomé.
Quería completar el juego. Un pequeño río de lágrimas sangrientas ha salido de tus ojos, y aunque estabas asustada, tienes una sonrisa.
Estás sonriendo por mi culpa.
Gracias.
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